La Gran Guerra cambió el mundo. De este conflicto bélico surgieron los servicios de inteligencia, tal y como los conocemos en la actualidad. España tuvo, a su pesar, un papel protagonista, hasta el punto de crear deliberadamente unos servicios de espionaje y contraespionaje que camparon a sus anchas por todos los rincones. España se fue convirtiendo poco a poco en el mayor escenario del espionaje de la Primera Guerra Mundial y, de esta manera, en el laboratorio para la nueva actividad de información que se desarrollaría a lo largo del siglo XX.

Conferencia a cargo de Fernando García Sanz, investigador científico del Instituto de Historia del Consejo Superior de Investigaciones Científicas.