¡Esta noche viene cargada de propuestas dinámicas y enérgicas! Artistas de alto voltaje nos invitan a disfrutar de lenguajes contemporáneos con raíces ancestrales: ritmos nacidos en tierras cálidas, cantos y pasos que sacuden, danzas urbanas que ocupan las calles, y bailarines que invaden todos los rincones creando escenarios inesperados. La danza es intangible, universal y diversa. No entiende de edades, formas, ni etiquetas. Y, como el ritmo, se cuela por todos los rincones, nos atrapa y nos resuena por dentro, llegando a todas las partes del cuerpo, incluso, en el alma. También habrá espacios para participar: talleres para hacer hablar el cuerpo con la percusión corporal o para jugar con el flamenco desde el gesto y para conectarnos a través del movimiento. Coreografías que emocionan, músicas que atraviesan fronteras, y cuerpos que explican aquello que las palabras no pueden decir. Ven a celebrar el verano, el movimiento, el cuerpo, el ritmo... la vida. ¡Bienvenidos! Que empiece el movimiento.