Faraón, guerra y diplomacia
Uno de los deberes del faraón era la supresión del caos, isfet, y la imposición y el cuidado del orden o maat. De cara al exterior, el monarca además de mantener las fronteras del territorio heredado, debía esforzarse por expandir su reino, ya fuera a través de relaciones diplomáticas y comerciales o por medios violentos, como la guerra y el saqueo.
Al final, lo importante era la capacidad del monarca de engrosar las arcas, sin importar el medio empleado para conseguirlo. Las artes plásticas, principalmente los relieves esculpidos en las paredes exteriores de los templos, inmortalizan la capacidad del monarca como gran proveedor de Egipto.
A cargo de José Manuel Galán, investigador del Instituto de Lenguas y Culturas del Mediterráneo y Oriente Próximo (ILC), e impulsor del proyecto Djehuty.
Horarios
Miércoles 27 de junio, a las 19 h